El conocido como puente romano de Paradela, en Francos, se localiza sobre el río Tinto, en la parroquia de San Xoán de Calo, en el límite del Ayuntamiento.
Construido en el Medievo, este puente es conocido por estar localizado en el camino de Iria Flavia hasta Santiago. Es de 14 m de largo y 1,70 de ancho, uno de los pasos fluviales más emblemáticos del Camino Portugués que con justicia figura en el escudo heráldico de Teo.
Hoy en día es un bonito lugar para disfrutar de la naturaleza, por el atraviesa una ruta de Apego (rutas adaptadas para familias), que partiendo del crucero de Francos emplea las pistas de tierra forestales para acceder a este rincón natural. También es posible acceder por la pista asfaltada.
Se encuentra señalizado y desde allí también parte una ruta al Castro Lupario, situado en el ayuntamiento vecino, pero vinculado históricamente a nuestro territorio, no solo como yacimiento arqueológico de prolongada ocupación sino también por su estrecha vinculación a las leyendas jacobeas que hablan de la génesis de la vieja Compostela.
El vecindario del lugar cuenta que existe la creencia de que el puente tenía una llave en el centro: la llave del puente, una pedriña cuadrada que sobresalía de las otras y gracias a la cual el puente fue aguantando el paso de los años, resistiendo todos los embates.
